CC. Material Extra. Ha-Leví, 28
Yehuda Ha-Leví, 28
Los esclavos del mundo son esclavos de otros esclavos;
el esclavo de Dios es el único esclavo que es libre.
Por eso, cuando cada uno de los hombres quiere coger su parte del botín.
“Mi parte sólo es Dios”, dice mi alma.
el esclavo de Dios es el único esclavo que es libre.
Por eso, cuando cada uno de los hombres quiere coger su parte del botín.
“Mi parte sólo es Dios”, dice mi alma.
Ha-Leví, Y.] Castillo, R. (1983). Antología Poética. Altalena.